Hay varias formas de colocar carbón en un parrilla de cerámica para barbacoa, cada uno adecuado para diferentes necesidades y preferencias culinarias.
Distribución uniforme:
El método más sencillo es esparcir uniformemente el carbón por el fondo de la parrilla. Esto garantiza una distribución uniforme del calor y es ideal para alimentos que requieren temperaturas de cocción constantes. Al evitar grandes espacios entre los trozos de carbón, puedes mantener una llama estable y predecible, lo que lo hace perfecto para principiantes o quienes buscan simplicidad.
Forma apilada o piramidal
Otra forma popular es apilar el carbón en forma de pirámide o cono. Esta disposición permite un punto de ignición más concentrado, ya que el carbón de abajo se enciende primero y se extiende gradualmente a las capas superiores. A medida que el carbón se quema, mantiene una fuente de calor constante, lo que lo hace ideal para sesiones de cocción largas y lentas. Además, la forma promueve un buen flujo de aire, lo que ayuda en la combustión y mantiene una llama constante.
En capas o anilladas para fumar
Si está interesado en agregar sabores ahumados a su comida, puede colocar capas o colocar el carbón en forma de anillo con astillas o trozos de madera colocados estratégicamente dentro o encima del carbón. Para fumar en capas, alterne capas de carbón y madera para fumar, creando una pila que imparta lentamente sabores de humo a medida que se quema. Alternativamente, cree un anillo de carbón y coloque leña para fumar en el centro o alrededor del perímetro. Este método controla la cantidad y dirección del humo, lo que le permite personalizar el nivel de ahumado de sus platos.